Shahrazad dijo:

Era el día 17 de la bárbara agresión israelí a Gaza… sus fuerzas militares habían atacado Gaza por tierra, mar y aire… 718 personas palestinas habían sido asesinadas y más de 4500 heridas por los bombardeos y los misiles de la aviación israelí… después, el domingo día 24 de Julio de 2014, el día 27 del Ramadan del año 1435 de nuestra Héjira cuando los tanques israelíes sedientos siempre de sangrese aproximaban disparando a diestro y siniestro y tomando como objetivos a mujeres y niños en ese momento, justo en ese momento, alguien a mi lado empezó a contarme. Ese alguien era Muhammad Eid Ibrahim, un profesor palestino que también ejercía de intérprete. Él me dijo que, después de enterarse por las noticias de la agresión israelí, un ángel noruego había volado a Gaza. Volvio a hacerlo en 2008 y 2012 cuando las mismas gresiones se repitieron. Ese ángel – confeso – era el doctor Mads Gilbert, el mismo que escribió una carta abierta la Presidente Obama diciendo:

“La noche pasada fue la peor de todas. La invasión por tierra causó innumerables personas heridas: cuerpos destrozados, miembros amputados, terribles hemorragias en personas de todas las edades todas ellas civiles, todas ellas inocentes.

Las personas que conducen las ambulancias, unas heroínas, llevan trabajando sin parar en turnos de 12 y de hasta 24 horas cubiertas de cenizas, zombis por la fatiga y las inhumanas condiciones en las que tienen que desarrollar su trabajo / en Shifa, por ejemplo, llevan sin cobrar los últimos 4 meses / mientras se esfuerzan en poner un poco de orden en el incomprensible caos de cuerpos, edades, miembros y extremidades, gente que puede andar o no, que respira o no, que sangra o no ¡tantos seres humanos! ¡SERES HUMANOS!

Ahora, una vez más, tratadas como animales por el ejército más poderoso del mundo.

Así que, desde aqui, quisiera hacer público mi enorme respeto por todas estas personas heridas, por su férrea determinación a pesar de tanto dolor, tanta agonía, el terrible shock. Mi admiración también por el personal y por todas las personas voluntarias es también infinita y mi identificación con la sumud (resistencia) palestina, total. Es lo único que me da fuerzas aunque a ratos lo único que quisiera es llorar y abrazarme fuertemente a alguien, gritar, oler la piel y el cabello de esas niñas y niños cubiertos de sangre, protegernos a todas en un abrazo interminable que no puedo permitirme…. Y ellas tampoco.

Esos rostros cubiertos de ceniza – Oh, NO! otra vez no por favor! – , esa enorme cantidad de personas heridas, mutiladas, cubiertos de sangre… todavía hay charcos de esa sangre inundando el suelo de la Sala de Emergencias, montones y montones de vendas empapadas que han de ser retiradas y -¡oh! ¡los voluntarios limpiadores… estan en todas partes trabajando sin parar, recogiendo la sangre, intentando quitar de en medio toda esa piel, cabello, ropa, las cánulas – lo que siempre deja tras sí la muerte – para llevárselo a donde no moleste y volver enseguida a empezar, a repetir el proceso una vez más, de nuevo siempre… porque en las últimas 24 horas han llegado a Shifa más de 100 nuevos casos, algo que sería más que suficiente para un hospital bien preparado funcionando a pleno rendimiento. Pero es que aquí ¡no hay nada! ni electricidad, ni agua, ni medicinas o pastillas de ninguna clase, ni monitores o instrumentos aunque sí, desde luego alguno hay pero está tan oxidado que parece un ejemplar de museo. Sin embargo esta gente, estas heroínas, no protestan, lo soportan todo y siguen adelante como si de soldados se tratara con una resolución infinita.

Mientras escribo estas palabras, a solas un rato en mi cama, no puedo contener mis lagrimas, mis cálidas e inútiles lágrimas de dolor y pena, de ira y de miedo. Me es imposible creer que esto esté pasando de nuevo… porque ahora, justo ahora, la macabra orquesta de las máquinas de guerra israelíes empieza su sinfonia de nuevo: Se oyen las andanadas de artillería procedentes de los barcos israelíes que patrullan la costa, los ronquidos de los F-16, los diabólicos drones (en árabe los llaman “Zennanis”, zumbadores), el confuso ronquido de los Apaches, todos estos instrumentos pagados, en su mayor parte, por USA.

Sr. Obama ¿tiene usted corazón?

Quisiera invitarle a pasar una noche en Shifa con nosotros– aunque solo fuera una noche – Podría disfrazarse incluso de limpiador. Estoy convencido, al cien por cien convencido, que sólo eso sería suficiente para cambiar la historia porque no puedo creer que haya nadie que teniendo corazón, y al mismo tiempo poder para cambiarlo todo, sea capaz de escapar de una experiencia semejante sin la decidida voluntad de poner fin a esta masacre, a la masacre continuada del pueblo palestino.

Y es que ahora, esos seres que no tienen corazón ni piedad han vuelto a hacer sus cálculos y planean otra “dahyia” (masacre) en Gaza, y parece que los rios de sangre empezarán a fluir otra vez esta noche . Desde aquí puedo oirles afinar sus instrumentos de muerte asi que le ruego que por favor, por favor haga algo. ESTO no puede continuar.

Pero el Dr. Mads Gilbert no pudoo terminar su carta… ni siquiera alcanzó a enviar su grito de socorro… el siguiente Noticiario volvió a rompernos el corazón y nos hizo saber que el número de mártires se había elevado a 807 y el de personas heridas alcanzaba ya la cifra de 5240

¿Y saben ustedes señoras y señores quien escuchó las palabras del Dr. Gilbert? Por supuesto no fue Obama, ¡Fue el pueblo Palestino! ¡Los hombres y mujeres de los Países Árabes! ¡La gente de buena voluntad de todo el mundo!.

Retorciéndose de rabia y de dolor Palestina se echó a la calle a pedir la protección del Tribunal Internacional de Justicia (ICC): 48.000 personas palestinas se pusieron en marcha desde el campo de refugiadas de al- Amari hacia la mezquita al Aqsa. El ejercito israelí, por su parte, intentó detenerles en el checkpoint de Qalandia disparando contra ellas munición real y balas de goma, rodeando Jerusalem y convirtiéndolo en un verdadero polvorín.

He sabido que el número de movimientos que buscan el restablecimiento de la verdad histórica ha crecido mucho en estos ultimos tiempos y que estos movimientos han decidido presentar numerosas demandas en contra de los criminales de guerra israelíes. Por su parte, Gilles de Vere, abogado francés, no cree sin embargo que esto sea suficiente por lo que- en nombre del Ministerio de Justicia Palestino,- ha presentado también una queja ante la Corte Penal Internacional. Esta queja acusa al Ejercito Israelí por los crímenes de guerra cometidos durante los meses de Junio y Julio del 2014 en lo que se llamo “Operación Borde Protector” y esta dirigida a Fatou Bensouda, abogado y Asesor legal de la Corte Penal Internacional.

Amanece. Y entonces Scheherezad dice: Si Israel me deja vivir una noche más, terminare de contar esta historia

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